lunes, 6 de febrero de 2017

Godofredo Oscós Flores. Los poemas

Instintual 

Te acercas al río,
... te ha dicho que no dejes de soñar,
siete pétalos blancos
ingrávidos
de una rosa sumergida
custodian tu sueño
del Rhin al Ganges

Torrente abajo
vuelves a sonreír
vuelves a soñar
...es entonces que te amo
como amo al río
como amo al sueño.

Fragmentos de universo en tu útero
eclipse-retina
tu cuerpo diluyéndose en mis ojos.

Sin que otras lo sepan
profanas mi silencio
mi reflexión de agua
algo de ti reconozco
en tu código de luna
tu mundo imaginado
mi sitio para amarnos.



Para poder volver, hay que partir un día

Noches hay tan distintas, aún cuando las estrellas sean las mismas de ayer.  Decisiones acertadas o errores se gestan después del silencio, las paredes observan y los muebles parecen escucharte inocentemente. Se pretenden entonces Pactos-Destino, como si al inconsecuente destino le fascinase pactar en las esquinas; Pactos-Amor como si al amor le encantase pactar con reglas inalterables; Pactos-Éxito como sí el éxito pactara sin ironías, se pretenden Pactos-Futuro como si al futuro le interesaran pactos provenientes del interminable presente; Pactos-Pasado como si al pasado le produjese éxtasis los pactos de un tiempo lineal sin puntos de regreso; se pretenden también Pactos con Uno Mismo, y éste... entre tantos y tantos pactos imaginados se revela como el único posible, pues, si hay alguien realmente capaz de defraudarnos o superar expectativas somos nosotros mismos y nadie más.

Son las 12:17, media noche, hace frío, el viento embiste, dicen por ahí que Diciembre tiene la costumbre de retornar cada Navidad, pero yo no les creo mucho.
Yo estoy pactando, pactando, pactando:
Estoy fabricándome una huida, me daré la oportunidad de pactar conmigo mismo, asumiendo consecuencias, quiero equivocarme, defraudarme a mi mismo, quizás sorprenderme a mi mismo, me he equivocado tantas veces lo reconozco, que ya no busco la certeza, más bien deseo hallar más dudas, realmente me sorprende releer las hojas de éste diario y descubrir cuan lleno de dudas estoy, debería dejar ya de escribirlo, para que cuando lo abra para leerlo no encuentre ninguna, ya no encuentre más dudas, sin embargo reconozco que necesariamente seguiré pasando de cuando en cuando por sus páginas como un lector compulsivo para curiosear...si he escrito algo.

De: Hoja suelta de diario



Páramos bajos

Ha estado zumbando el ayer
en mi oído izquierdo
el futuro en mi costilla
sangró presagios últimos
antes que la luna
huyera de tus manos
pidiendo perdón
por no saber lo que hacía.

Besos trémulos
arrojados al azar
le mintieron al asfalto;
sobre el desengaño,
sobre la espera,
y también sobre una carta de amor que nunca llegaría
porque nunca sería escrita
gestando así, la más bella postal de ausencia,
la más perfecta,
para enviar a todos aquellos
...que no han perdonado al destino
hubo una luciérnaga digital
impávida
que memorizó mi gesto
pero esa era otra historia que había que olvidar.

Al rodar el sol
hubo una vez un poema
que dejó de soñarnos.


Quisiera convencerlos que Dios no existe


pero hoy
lo vi
sufriendo

De: Hoja suelta de diario


                                                                                 Godofredo Oscós Flores

No hay comentarios.:

Publicar un comentario